Se puede ver como la mujer se lo pasa en grande y sin temor alguno de que le pueda suceder algo, empieza un ritual de sugerentes movimientos y un sensual baile, demostrando lo cómoda que se siente ante el tan temido animal mécanico para muchos. Convirtiéndose en el centro de las miradas de cuantos presenciaban la situación.
Todos los presentes se ven que estaban disfrutando con ella, en especial los hombres, ya que mas de uno estaba con la boca abierta, al ver el dominio que la mujer tenia del toro mecánico. Y aunque finalmente la joven fue a parar a donde todos suelen ir al montar en uno de estos, osea el piso, la verdad es que hay que reconocer que tuvo mucho aguante y encima permitiéndose hasta bailar. ¿Quien es capaz de igualarla?