Es fácil imaginarnos lo que pasó pero ya lo que vino a continuación es mucho más difícil de creer ya que solemos tener un mínimo de respeto por la mentalidad de los que nos rodean.Esta chica se quitó la camiseta en medio del concierto, enseñando sus partes como si fuese lo más normal del mundo. La euforia, la emoción, pueden ser muchas cosas pero desde luego la idea le pasó por la cabeza y decidió aplicarla con todas sus consecuencias, o al menos las que llegó a pensar en su cabeza.
Fue manoseada por cientos de personas, tocándole todo lo que pudieron y haciendo que la chica viviera el peor día de su vida. Una auténtica tragedia para ella que por otra parte se lo tiene relativamente merecido, por ir de libertina y no darse cuenta que la ropa está para algo más que para quitársela.